miércoles, 17 de abril de 2013

Perdiendo el equilibrio

Últimamente me he sentido un cansancio mayor al acostumbrado. De lunes a viernes caigo rendida y me quedo dormida leyendo o viendo TV. Duermo mal y a veces me despierto por la noche. Los fines de semana puedo dormir hasta 4 horas seguidas durante el día. Además, me cuesta trabajo poner atención y concentrarme en otras actividades fuera del trabajo como leer, escribir y hasta conversar. Lo que más me molesta de todo esto es que el 85% de mis sueños son sobre problemas en el trabajo.

Sobresaturada, hiperexpuesta fueron palabras que escuché de mi doctor / couch de estilo de vida. El overflow laboral me impide estar bien y rendir como se debe no sólo en el trabajo, sino también en mi vida.

Culpar al trabajo, renunciar o bajarle a mis responsabilidades no son una opción. Son una salida fácil que no resuelve el problema de fondo.

Entiendo que lo que debo hacer es encontrar un equilibrio que me permita ser creativa y disfrutar todos esos momentos. Necesito más rutina y menos autocompasión. Necesito relajarme y plantear mi visión, entender mis habilidades y sobre todo, relajarme para poder enfrentar los retos que se vienen.

Hoy tuve un sueño extraño. Como todos los sueños, no lo recuerdo bien pero iba más o menos así: estaba en la recepción de un gran hotel. La recepción era de mármol y estaba llena de helechos y floreros con rosas. Al fondo, se veía un jardín con muchos árboles y flores. Yo esperaba impaciente a que la gente de la recepción arreglara sus problemas con las reservaciones. Cuando me tocó mi turno en recepción, resultó que uno de nuestros desarrollos podía resolverles el problema. Me acuerdo perfecto que dije el nombre de la solución. Lo curioso una vez que me desperté, fue que la solución que resolvía el problema del hotel no era el que yo mencioné, sino la que a mí me trae con overflow.

No hay comentarios:

Publicar un comentario